La aromaterapia es una disciplina que practica la terapia de las emociones, es ideal cuando nos sentimos deprimidas o tenemos mucho estrés acumulado del día a día, es muy útil para mejorar nuestro temperamento y despertar la buena vibra en lo más profundo de nuestro ser para hacer que sane nuestro interior, aprende aquí un poco más de sus beneficios, como aplicarla y como hacer aceites esenciales.
Los olores pueden llevarnos a lo más profundo de nuestra infancia, darnos sensaciones positivas y ofrecer un paseo por nuestra memoria y promueven la relajación y tranquilidad, la aromaterapia se vale de dichos efectos para ayudarnos a resolver conflictos internos, que nos afectan, equilibra las emociones y son beneficiosas para acompañar otros tipos de tratamientos.
Los expertos en aromaterapia vinculan sus técnicas, con tratamientos espirituales, mencionan que los aromas despiertan el inconsciente, haciendo que el paciente se desconecte de su yo dominante y se deje llevar por las imágenes asociadas a los olores, conectando así los sentidos con el espíritu.
Entre los beneficios de la aromaterapia se encuentran la disminución de la ansiedad y el estrés, mejoría en los síntomas de la depresión, aceptación de sí mismo, estimulación cerebral y mejora de la memoria, también es muy favorable para practicar meditación y yoga. Además de los beneficios psicológicos, la aromaterapia también tiene propiedades antisépticas, diuréticas, expectorantes, sedantes, antibióticas y analgésicas.
Para aplicar los aceites esenciales, se utilizan varias técnicas, la primera y la más común es la de inhalación, colocando un par de gotitas en un pañuelo y dejando este sobre el rostro para oler, también se pueden poner las gotas sobre una taza de agua caliente y dejar que el aroma del vapor sea inhalado, pero si se quiere que el olor se esparza por la habitación entonces las gotas se ponen en un difusor que reparta el olor con el calor.
La segunda técnica es a través de masajes con aplicación directa a la piel, los aceites esenciales se diluyen en una concentración entre el 2 y 10% en aceite de oliva o aceite de aguacate, el masaje debe ser profundo y relajante para que tenga mejor efecto.
Es común también darse baños aromáticos, el agua de la bañera debe estar tipia para evitar la evaporación de los aceites esenciales, y que el aroma dure por más tiempo. Existen otras formas de aromaterapia menos usados, como los cataplasmas y el uso interno, pero deben ser supervisados para hacerlo correctamente.
COMO HACER ACEITES ESENCIALES
Para empezar debes buscar o cosechar la materia prima, pueden ser flores, o ramilletes, busca el adecuado para ti y córtalos cuidadosamente, verifica que estén enteras y sin ningún daño, luego puedes hacerlas secarse por un día o dos, o puedes dejarla en su estado natural y fresco, añade las flores o ramitas en un alambique especial para destilar aceites, (lo puedes comprar o construir tu misma) las mismas no deben cortarse y tampoco deberían rozar o quedar en el fondo del alambique, el agua que vayas a utilizar para la infusión debe ser pura y filtrada, además debe ser suficiente para que complete la destilación, el alambique se encargara de separar los aceites esenciales extraídos los cuales debes envasar en un frasco de vidrio limpio.
Otra forma de preparar aceites esenciales caseros es calentar durante una hora en una olla pequeña una taza de aceite de oliva donde estén sumergidas completamente las plantas elegidas. También puedes hacer una baño de maría donde calientes aceite de almendras con las plantas elegidas durante al menos una media hora y dejarlo reposar por un día, luego repetir la operación por tres días seguidos, removiendo las plantas marchitas y reemplazándolas por otras frescas.
